Los pasteles, tartas o bizcochos con frutas son mis favoritos, en especial si tienen manzanas, pero esta receta de pastel de peras merece la pena de verdad. Recomiendo utilizar cualquier variedad de peras que no esté excesivamente madura, para que no se deshaga en el horneado, ya que a la hora de comer este pastel (sobre todo si está templado y el chocolate medio derretido), la suavidad del bizcocho junto con la textura de la pera y el chocolate forman una combinación perfecta. Además, tostar la mantequilla antes de añadirla a la masa es uno de los procesos que mejora muchísimo el sabor del bizcocho. Esta receta está basada en la que aparece en el blog Smitten Kitchen.
Ingredientes:
- 140 gr. de harina
- 150 gr. de azúcar
- 1 cucharadita de levadura
- 1/4 cucharadita de sal
- 3 huevos
- 115 gr. de mantequilla
- 3 peras peladas y cortadas en dados
- 50 gr. de gotas de chocolate negro
Preparación:
Calentar el horno a 180ºC. Preparar un molde untándolo con un poco de mantequilla y espolvorear harina.
Tostar en una sartén o en un cazo la mantequilla durante unos 6 u 8 minutos, sin que se queme. Tiene que quedar con un ligero color dorado y un aroma a nueces.
En un bol, tamizar la harina, la levadura y la sal.
Montar los 3 huevos durante unos 5 minutos hasta que blanqueen y aumenten su volumen. Agregar el azúcar a los huevos y batir unos 5 minutos más.
Cuando la mezcla huevos - azúcar comience a perder un poco de volumen añadir poco a poco la mantequilla y después el harina. Mezclar poco tiempo, porque si no, la masa perderá todo el volumen y ese no es el objetivo.
Verter esta mezcla en el molde preprarado previamente y agregrar por encima las peras y las gotas de chocolate (en el horno se irán hundiendo y repartiendo por la masa ligera de bizcocho).
Hornear unos 40 o 50 minutos a 180ºC hasta que, al pinchar el bizcocho con una puntilla, salga seco. Este pastel está mucho mejor si se sirve templado. También se podría añadir algún licor a las peras para que macerara con ellas durante unos minutos.