Tarta de puerros

Os presento hoy una receta muy sencilla, con el puerro como protagonista absoluto y que puede servir para una comida con invitados o una cena más informal. La base de la tarta es el hojaldre; como es muy complicado de elaborar en casa y no se suele tener tiempo, he optado por comprarlo fresco, pero congelado también funciona muy bien (sólo habría que descongelarlo a temperatura ambiente durante una hora o dos aproximadamente). Recomiendo tomarse su tiempo en pochar los puerros, para que queden dorados y suelten su dulzor.

Ingredientes:

- 1 lámina de hojaldre de unos 230 gr.
- 2 o 3 puerros medianos
- 1 diente de ajo
- 2 cucharadas de maicena (almidón de maíz)
- 200 ml. de leche
- 1 huevo grande y parte de otro para pintar el hojaldre
- Sal y pimienta al gusto
- 2 cucharadas de aceite de oliva







 Preparación:

Lavar y cortar los puerros en trozos medianos. Picar el diente de ajo.

En una sartén con las 2 cucharadas de aceite, pochar muy bien los puerros con el ajo. Agregar sal y pimienta. Cocinar a fuego suave durante al menos 30 minutos o hasta que los puerros estén blandos y adquieran un leve tono dorado.

Cuando ya estén pochados los puerros, subir el fuego y añadir la maicena y un poco de leche. Remover continuamente para que espese y verter el resto de la leche. Cocinar a fuego suave durante 5 o 7 minutos, apagar el fuego y reservar.

Mientras la mezcla se va enfriando, engrasar un molde de 22 cm de diámetro con un poco de aceite y cubrirlo con una lámina muy fina de hojaldre (unos 2 o 3 mm). Precalentar el horno a 200ºC.

Cuando el relleno de la tarta esté templado, batir el huevo y agregarlo a la mezcla, removiéndolo bien para que se integre del todo.

Verter el relleno sobre el molde cubierto con hojaldre y taparlo con otra lámina fina de masa. Hacer unos pequeños cortes para que pueda salir el vapor y pintar la superficie con huevo batido. También queda bien si se hacen tiras de masa de hojaldre y se va cubriendo el relleno en forma de enrejado.

Hornear unos 40 minutos a 200ºC o hasta que el hojaldre quede dorado. Servir bien caliente.

Hace un año en Blue Cuisine: Pollo con puerros y setas

Ensalada de invierno

La temporada de otoño e invierno es muy propicia para elaborar recetas de platos contundentes, sabrosos y, sobre todo, calientes, para compensar las bajas temperaturas ambientales. Sin embargo, una ensalada con hortalizas y frutas de invierno también se agradece para refrescar de vez en cuando tantas grasas. En el caso de la receta de hoy combinamos ingredientes ácidos y dulces de frutas con el amargor de la endivia. El aliño, más bien salado, es el encargado de equilibrar esta mezcla de sabores. Os recomiendo que la probéis. Esta receta está basada en la aparecida en el blog 101 Cookbooks: he cambiado la rúcula por la endivia y he utilizado nueces como fruto seco principal.

Ingredientes:

- 1/2 manzana de tipo Royal Gala o Fuji

- 1 endivia

- 1 tallo de apio fresco

- 20 gr. de nueces picadas

- 1 puñado de granos de granada

- 1 diente de ajo

- 2 cucharadas de mayonesa

- 1 cucharada de vinagre de manzana

- 1 pellizco de romero seco

- Sal y pimienta al gusto

Preparación:

En un mortero, majar hasta obtener una pasta el diente de ajo con la sal, la pimienta y el romero. Reservar.

Picar en trozos pequeños la manzana y el tallo de apio. Partir la endivia en trozos medianos. Picar las nueces y sacar los granos de la granada.

Mezclar las hortalizas y frutas en una ensaladera y verter por encima el aliño (la mayonesa mezclada con el majado del mortero).

Sevir en seguida, antes de que las manzanas comiencen a oxidarse y a oscurecerse (si se va a tardar en servir, se pueden rociar los trozos de manzana con unas gotas de limón).

Hace un año en Blue Cuisine: Berenjenas rellenas

Panceta de cerdo estofada a las cinco especias

Si quieres probar con la comida oriental y prefieres empezar con algo sencillo y exótico, esta receta es la que necesitas. Incorpora la combinación de sabores típicos de Asia: dulce, amargo, ácido, salado y umami, que es ese sabor que da "sustancia" a los platos y que tiene el queso o la salsa de soja. Este plato está basado en la receta del libro (desgraciadamente descatalogado) Cocina asiática de Terry Tan, una recopilación de ingredientes, utensilios, recetas y técnicas de esta cocina tan variada. La receta de panceta de hoy proviene del norte de China.

Ingredientes:

- 500 gr. de panceta de cerdo troceada

- 2 cucharadas de aceite

- 1 cucharada de azúcar

- 5 cucharadas de salsa de soja

- 2 cucharaditas de 5 especias chinas

- 1 litro de agua

- 100 gr. de arroz blanco hervido para acompañar

 

Preparación:

Calentar en una cazuela el aceite con el azúcar. Dejarlo cocer hasta que se forme un caramelo dorado claro.

Agregar los trozos de panceta y rehogar a fuego medio hasta que se cubran del caramelo.

Añadir las cinco especias, la salsa de soja y el agua. Dejar cocer a fuego lento unos 40  - 45 minutos. Si se necesita más agua, se puede añadir más poco a poco.

Pasado este tiempo comprobar que la panceta esté tierna. Si la salsa está muy líquida, subir el fuego y reducir, ya que debe quedar bastante espesa, para que cubra bien la carne y el acompañamiento (en nuestro caso arroz blanco hervido).

Calentar el arroz blanco y ponerlo en el cuenco de servir. Verter por encima la panceta con la salsa.

Hace un año en Blue Cuisine: Alubias con manita de cerdo

Enlaces interesantes del mes de octubre

Durante este mes, he recopilado muchas recetas de temporada que podéis consultar en mi tablero de Pinterest. De todas ellas, he seleccionado las que presento a continuación, junto con artículos sobre gastronomía, historia y noticias de actualidad, que recomiendo:

• Una receta clásica de pollo asado entero al limón (tan difícil de ver estos días). Sopas otoñales como esta de calabaza o esta otra más sofisticada.

• El otoño no es sólo época de guisos y asados; esta ensalada de manzana y apio con vinagreta de romero lo demuestra.

• Y si apetece algo de dulce, se pueden probar estas galletas de manzana o estas especiadas.

• Para los interesados en la historia de la cocina, en este enlace hay un interesante artículo sobre la ternera y el cerdo en la Edad Media.

• Me han gustado mucho estos artículos sobre qué aceite de oliva es más adecuado para diferentes guisos de legumbres y cómo utilizar el té para algo más que beber en infusión.

• Para los celíacos, aquí sugieren 15 recetas al horno sin gluten.

• Me encanta saber que hay muchas cocinas azules...

• Y, por último, dos opiniones sobre noticias de actualidad: el control corporativo de los alimentos y algunas aclaraciones sobre el informe acerca del consumo de carne procesada y carne roja de la OMS, este último artículo del biólogo y nutricionista Juan Revenga.

Manzanas asadas rellenas de miel y frutos secos

Estamos en plena temporada de manzanas y hay que aprovechar para utilizarlas en tartas, bizcochos, asados o ensaladas. El postre que os presento hoy es muy reconfortante para estos días de otoño en que el sol se pone a media tarde. He utilizado dos tipos de manzanas para hacer pruebas: la Red Delicious y la Pink Lady. Aunque ambas pueden asarse bien, la que cosigue mejor sabor, creo, es la Red Delicious. Y, para aquellos a los que les guste la combinación ácido - dulce, la manzana ideal para esta receta es la Reineta.

Ingredientes:

- 4 manzanas grandes
- 30 gr. de nueces
- 30 gr. de pasas de Corinto
- 2 cucharadas de miel (yo he utilizado miel de brezo)
- 3 cucharadas de brandy
- 1 palito de canela en rama






Preparación:

Lo primero de todo es picar las nueces y poner las pasas de Corinto a macerar en el brandy unos 30 minutos.

A continuación, en un cuenco pequeño se mezcla la miel, las nueces y la mezcla de pasas y brandy. La miel que he usado es bastante espesa y fuerte; la mezcla debe quedar melosa, aglutinando los componentes del relleno. Reservar para rellenar las manzanas.

Se vacía el corazón de las manzanas y se mete un trocito de canela en rama en el fondo de cada una. Luego, con una cucharilla, se rellenan con la mezcla de frutos secos y miel.

Hornear las manzanas durante 50 o 60 minutos a 200ºC. Estas manzanas están muy buenas recién sacadas del horno, pero también se pueden comer templadas.

Hace un año en Blue Cuisine: Muffins de naranja y almendras