La receta que os presento hoy es un postre muy adecuado para una celebración o para llevar a una fiesta. Se puede dejar preparado el día anterior y, aunque para su elaboración haya que seguir bastantes pasos, el resultado merece la pena. El relleno de la tarta es de frangipane, una masa con huevos, mantequilla y almendras molidas que se utiliza en el norte de Francia, pero también en platos orientales. Se puede aromatizar con cítricos, licores, especias y su textura es suave, delicada, aunque tenga un aporte calórico importante. Esta receta está basada en la que aparece en el libro Caprichos al horno.
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- 175 gr. de harina
- 3 yemas de huevo
- 60 gr. de azúcar
- 75 gr. de mantequilla
- La ralladura de 1 limón
- La ralladura de 1 limón
- 1 pellizco de sal
Ingredientes para el relleno:
- 4 peras madura
- el zumo de 1/2 limón
- 125 gr. de almendras molidas
- 125 gr. de mantequilla
- 100 gr. de azúcar
- 1 huevo
- 1 yema de huevo
- 1 cucharada de ron
- 35 gr. de harina
- 2 cucharadas de mermelada de albaricoque
- 2 o 3 cucharadas de agua o ron
Preparación:
Comenzaremos por la tartaleta. Esta preparación se puede hacer el día anterior y es recomendable dejar que repose en la nevera unas horas. Además, puede servir como base para todo tipo de tartas que necesiten un relleno más líquido que necesite cocción en el horno.
Se engrasa un molde de unos 22 cm. de diámetro y se reserva.
En un cuenco se mezcla la harina con las 3 yemas de huevo, el azúcar, la ralladura de limón y la sal.
Se agrega la mantequilla en trozos y se desmiga en el resto de la masa, trabajándola muy rápido con los dedos. Si se necesita se puede añadir 1 cucharada de agua.
Se saca la masa del cuenco y se trabaja unos 2 minutos en la mesa.
Envolver la masa de tartaleta en un paño y dejar que repose en la nevera unos 30 minutos (la masa adquiere brillo y es más fácil de estirar).
Después del reposo, estirar la masa con un rodillo y cubrir el molde. Para tapar las posibles grietas y apretar la masa en los bordes del molde, utilizar una pequeña bola de masa. Recortar los bordes de la tartaleta para que quede con una presentación homogénea y pincharla con un tenedor. Refrigerar la tartaleta 1 hora o toda la noche.
Para elaborar el relleno, se pelan y cortan las peras en octavos y se rocían con el zumo de limón para que no se oscurezcan al oxidarse.
Se mezcla muy bien la mantequilla con el azúcar (se puede utilizar unas varillas eléctricas), hasta que se consiga una textura muy suave.
Agregar poco a poco los huevos, batiendo bien cada vez.
Añadir la almendra molida, la harina y el ron y mezclar muy bien.
Rellenar el molde (cubierto con la tartaleta), repartiendo la masa de manera homogénea para que quede igualado.
Poner las peras encima y hornear a 180ºC unos 25 o 30 minutos.
Sacar la tarta del horno y, cuando se haya enfríado, pintar la superficie con una mezcla templada de meremelada de albaricoque y ron (o agua). Ya está lista para servir y disfrutar.
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