Si os gustan las crêpes y no queréis complicaros mucho en la cocina, se puede hacer con la misma masa y en el horno, una tortita o panqueque gigante que en la cocina anglosajona se llama Dutch Baby. Este delicioso postre se caracteriza por una corteza crujiente y un interior suave y cremoso, que admite multitud de rellenos, sobre todo de frutas. En la propuesta de hoy os sugiero la combinación de melocotones y almendras, pero también queda muy bien con cerezas, manzanas, peras, plátanos e incluso con chocolate. La receta está basada en la que aparece en el blog Half Baked Harvest.
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Ingredientes:
- 3 huevos grandes
- 25 gr. de azúcar
- 100 gr. de harina
- 160 ml. de leche
- 50 gr. de mantequilla
- 1 cucharada de brandy
- 1 pellizco de sal
- 3 melocotones cortados en gajos
- 25 gr. de almendras laminadas
- Azúcar glas
- 1 poco de zumo de limón
Preparación:
Si tenemos una sartén apta para horno, se puede cocinar todo en el mismo recipiente, si no, se precalienta una fuente de horno a 200ºC mientras se prepara el resto de ingredientes. Es muy importante que la fuente o la sartén donde se va a verter la masa esté caliente antes de meter todo en el horno, ya que este calor permitirá a la mezcla subir.
En un cuenco, mezclar los huevos, azúcar, leche, harina, brandy y una pizca de sal. La mezcla debe quedar líquida, como si fuera para hacer crêpes.
Se trocean los melocotones en gajos y se saltean en una sartén a fuego fuerte con la mantequilla previamente derretida unos 2 minutos.
En la fuente de horno caliente, o en la misma sartén, se vierten los melocotones y se echa por encima la masa.
Hornear unos 15 o 20 minutos a 225ºC. La masa se inflará mucho en el horno; por eso es importante que el recipiente donde la hemos puesto esté muy caliente. Cuando ya esté hecha y al sacarla se bajará bastante. En el hueco central que queda decoramos con las almendras laminadas, el azúcar glas y terminamos con un toque de zumo de limón recién exprimido.
Este postre está mejor si se toma templado.
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