Si soléis visitar este blog, habréis visto que ,de vez en cuando, presento algún postre con el chocolate como protagonista (como este pastel de peras con chocolate negro). Hoy se trata de una tarta de chocolate en tres texturas; solo apta para los súper chocolateros. Para disimular, la he adornado con unos pistachos troceados, que combinan muy bien. La tarta lleva un tiempo de elaboración, pero algunos pasos (como la preparación de la tartaleta) se pueden hacer el día anterior. La receta está basada en la que aparece en el blog Jernej Kitchen.
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Ingredientes:
Para la tartaleta de cacao:
- 155 gr. de harina
- 115 gr. de mantequilla fría en dados
- 6 cucharadas de cacao en polvo sin azúcar
- 1 y 1/2 cucharaditas de azúcar
- 1 pellizco de sal
- 60 ml. de agua muy fría
Para el relleno de la tarta:
- 200 ml. de nata para montar
- 200 gr. de chocolate negro de cobertura
- 1 pellizco de sal
- 50 gr. de mantequilla fría
Para el glaseado de chocolate:
- 70 ml. de agua
- 85 gr. de azúcar
- 30 gr. de cacao en polvo sin azúcar
- 60 ml. de nata para montar
- 3 gr. de gelatina en polvo
-Un puñado de pistachos para decorar
Preparación:
Primero elaboramos la tartaleta de chocolate, que necesita reposo. En un bol mezclamos todos los ingredientes menos el agua. Tiene que quedar una textura parecida a arena.
A continuación, se añade un poco de agua y los ingredientes se tienen que amalgamar, de manera que se forma una masa que se despega del bol. Hay que ser cuidadoso, porque quizás no se llegue a utilizar toda el agua. Se forma un disco con la masa y se deja reposar en la nevera 1 hora.
Precalentamos el horno a 180ºC y mientras, sacamos la masa de tartaleta del horno y la estiramos para cubrir un molde de 22 cm. de diámetro. Sobre la masa ponemos papel de hornear y unos pesos (como unos garbanzos) para hornear la tartaleta y que no suba al cocinarse. Horneamos durante 30 minutos y dejamos enfriar.
Mientras tanto, preparamos el relleno de la tarta, que no es más que una ganache de chocolate. Calentamos la nata en un cazo y ponemos el chocolate de cobertura en un bol. Cuando la nata comience a hervir, vertemos la nata caliente sobre el chocolate y removemos continuamente, hasta que el chocolate se funda y quede una mezcla brillante.
Después agregamos el pellizco de sal y la mantequilla bien fría y en dados. Removemos un poco y reservamos para que pierda temperatura.
Cuando, tanto la tartaleta como el relleno estén a temperatura ambiente, vertemos el relleno sobre la tarta y dejamos enfriar unas 2 horas.
Para hacer el glaseado de chocolate, disolvemos la gelatina en 2 cucharadas de agua durante unos 10 minutos. Después, en un cazo ponemos hervir el agua, el cacao y el azúcar removiendo constantemente.
Cuando la mezcla comience a hervir, agregar la nata y quitar del fuego.
Añadir la gelatina y mezclar muy bien. Colar la mezcla y dejar que se temple. Es muy importante colar la mezcla para que no quede ninguna impureza o grumo de gelatina.
Verter el glaseado de chocolate sobre la tarta bien fría y esperar unas horas a que cuaje (se puede meter en la nevera hasta la hora de servir).
Servir fría con unos pistachos troceados como decoración.
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